El contenido evergreen es el sueño de cualquier marketer. Trae tráfico y conversiones… para siempre. ¿Es eso posible? ¿Alguna vez alguien creó un contenido verdaderamente evergreen y está vivo para contarlo? En este artículo voy a orientarte sobre cómo crear contenido evergreen o perenne y buenos ejemplos para que te inspires.
¿Preparado?
¿Qué es el contenido evergreen (y por qué la mayoría no lo es)?
El contenido evergreen es el que no caduca, como un buen clásico literario. Se mantiene relevante con el paso del tiempo y sigue generando tráfico y atrayendo clientes meses o incluso años después de su publicación.
Suena ideal, ¿verdad? Un contenido con el que trabajas una vez y te sigue dando resultados. Pero hay un problema: muchas empresas creen que están creando contenido evergreen cuando en realidad no lo están haciendo bien.
Vamos a desmontar algunos mitos.
Mito 1: “Evergreen significa que no necesita mantenimiento”
Uno de los errores más comunes es pensar que basta con escribir un artículo atemporal y dejarlo ahí para siempre. En realidad, el contenido evergreen bien trabajado es como un bonsái: si lo cuidas, seguirá creciendo sano y fuerte, pero si lo abandonas, se llena de ramas secas y pierde su atractivo.
Este que ves aquí arriba es un ejemplo de un contenido evergreen de este mismo blog, «Cómo redactar una nota de prensa«. Puedes ver cómo ha ido perdiendo fuerza hasta que lo actualicé, ¡y menos mal que lo hice!
Imagina que escribes un artículo sobre “Las mejores herramientas de marketing de contenidos”. En teoría, es un contenido evergreen, porque la gente siempre buscará herramientas de marketing de contenidos. Pero ¿qué pasa si dentro de un año algunas herramientas desaparecen, cambian sus precios o aparecen opciones mejores? Si no lo actualizas, dejará de ser útil y perderá posiciones en Google.
Por eso, el verdadero contenido evergreen necesita revisiones periódicas y, en algunos casos, ajustes estratégicos. Más adelante hablaremos del content pruning, una técnica clave para mantener el contenido actualizado sin perder su esencia.
Mito 2: “Cualquier guía es evergreen”
No todo lo que parece atemporal lo es realmente. Muchas guías informativas dejan de ser útiles con el tiempo porque dependen de modas, tecnologías o cambios en la industria.
Por ejemplo, un artículo titulado “Tendencias de SEO en 2024” es claramente perecedero. En cuanto pase un año, ya no tendrá sentido y dejará de generar interés.
En cambio, un artículo como “Cómo funciona el SEO y qué principios nunca cambian” es una apuesta más segura. Hablar de los fundamentos del SEO, en lugar de tendencias específicas, hace que el contenido siga siendo relevante incluso dentro de varios años.
Entonces, ¿qué hace que un contenido sea realmente evergreen?
Un buen contenido evergreen tiene tres características clave:
1. Trata temas que la gente busca de forma recurrente. No está ligado a una moda pasajera ni a un evento concreto.
2. Se puede actualizar fácilmente sin perder su esencia. No requiere reescribirlo desde cero, solo pequeños ajustes cuando sea necesario.
3. Aporta un valor duradero. No solo responde a una pregunta del momento, sino que sigue siendo útil con el tiempo.
El contenido evergreen no es un artículo que se publica y se olvida. Es más bien como un clásico del cine: sigue funcionando con los años, pero de vez en cuando necesita una restauración para mantenerse impecable.
¿Por qué es tan valioso el contenido evergreen?
Si el contenido evergreen fuera un personaje, sería ese secundario que no roba la escena al principio, pero que con el tiempo se convierte en imprescindible. No genera un pico de visitas explosivo como una noticia viral, pero ofrece algo aún mejor: tráfico constante, estable y predecible.
¿Por qué es tan relevante? Veamos sus principales beneficios.
1. Tráfico que no depende de la actualidad
Los contenidos de tendencia pueden atraer mucho tráfico en poco tiempo, pero su efecto se diluye rápido. En cambio, un buen contenido evergreen sigue recibiendo visitas meses o incluso años después de publicarse.
Piénsalo así: un artículo sobre “las mejores campañas de marketing de 2024” tendrá un pico de visitas en su lanzamiento, pero caerá en el olvido en cuanto llegue 2025. En cambio, una guía sobre “cómo crear una campaña de marketing efectiva” seguirá siendo útil en cualquier momento.
Presta atención a esta captura:
Es de un artículo llamado «Tener éxito en Instagram: guía paso a paso para 2023«. Como puedes comprobar, consiguió mucho tráfico cuando se publicó y fue perdiendo fuerza hasta que hoy, dos años después, es prácticamente irrelevante para Google.
2. Mejora el SEO y la autoridad de tu web
A Google le encanta el contenido evergreen bien trabajado. ¿Por qué? Porque responde a preguntas que los usuarios siguen haciéndose con el tiempo.
Cuando un artículo evergreen se mantiene relevante y recibe visitas de forma continua, Google lo considera un contenido de valor y lo posiciona mejor. Además, al ser un recurso útil, es más probable que otras webs lo enlacen, lo que refuerza su autoridad.
3. Mayor rentabilidad a largo plazo
Crear contenido cuesta tiempo y dinero, así que es lógico pensar en el retorno de inversión. Los artículos de actualidad pueden generar impacto inmediato, pero su vida útil es corta.
El contenido evergreen, en cambio, sigue atrayendo visitas, leads y clientes mucho después de haberlo publicado. Es un activo digital que trabaja para tu negocio de manera sostenida, sin necesidad de invertir constantemente en nuevas publicaciones para mantener el tráfico.
4. Se puede reutilizar en múltiples formatos
¡Esto me encanta! Otro gran beneficio del contenido evergreen es que se adapta bien a distintos formatos. Un artículo de este tipo puede convertirse en:
• Una infografía
• Un episodio de pódcast
• Un hilo en redes sociales
• Un vídeo explicativo
Esto significa que una sola pieza de contenido puede alimentar distintas estrategias, maximizando su impacto.
5. Refuerza tu imagen de experto
Si publicas contenido que sigue siendo útil con el tiempo, consigues que tu marca sea vista como una referencia en su sector. Un blog lleno de artículos que siguen siendo válidos años después demuestra conocimiento y solidez, lo que genera confianza en tu audiencia.
En resumen, el contenido evergreen es una inversión a largo plazo. No solo te ayuda a mantener un flujo constante de visitas y leads, sino que fortalece tu posicionamiento en Google y refuerza tu autoridad en el sector.
Cómo elegir temas verdaderamente atemporales
No todo lo que parece evergreen lo es en realidad, como hemos visto en este artículo. Si quieres que un contenido siga funcionando con el tiempo, la clave está en elegir bien el tema. No vale cualquier cosa.
Aquí van algunas estrategias para asegurarte de que el contenido que creas tenga una vida larga y productiva.
1. Usa herramientas para detectar búsquedas recurrentes
Si quieres que un contenido sea evergreen, debe responder a preguntas que la gente se haga siempre, no solo durante un período concreto.
Para comprobarlo, hay herramientas que pueden ayudarte:
• Google Trends: te dice si una búsqueda tiene demanda estable o si es una moda pasajera. Si la tendencia sube y baja como una montaña rusa, mejor busca otro tema.
• AnswerThePublic: muestra las preguntas que la gente hace sobre un tema en los buscadores. Las preguntas más generales suelen ser las más atemporales.
• Ubersuggest y Ahrefs: permiten analizar el volumen de búsqueda de una palabra clave y ver si se mantiene constante con el tiempo.
Un buen indicador de que un tema es evergreen es que la gente lo sigue buscando año tras año, sin grandes altibajos.
2. Piensa en preguntas que tu audiencia siempre se hará
Una forma sencilla de encontrar ideas evergreen es pensar en los problemas recurrentes de tu sector. ¿Cuáles son las dudas que siempre tienen los clientes, independientemente de la moda o la tecnología del momento?
Por ejemplo, en marketing digital, hay preguntas que siempre serán relevantes:
• Cómo mejorar el SEO de una web.
• Cómo redactar un correo de ventas eficaz.
• Cómo conseguir más clientes sin aumentar el presupuesto en publicidad.
No importa si estamos en 2024 o en 2030, estas preguntas seguirán teniendo sentido, aunque las herramientas o estrategias evolucionen.
3. Evita modas y referencias temporales
Algunos temas parecen interesantes en el momento, pero tienen fecha de caducidad. Me ha pasado, créeme. ¿Te acuerdas del dichoso COVID? Ahí estábamos todos, escribiendo como locos sobre el tema.
Si quieres que tu contenido dure, evita fechas en el título y no lo bases en datos que cambian constantemente.
4. Apuesta por guías, metodologías y fundamentos
Los mejores contenidos evergreen suelen ser:
• Guías completas (“Cómo hacer una campaña de email marketing paso a paso”).
• Glosarios y definiciones (“Diccionario de términos de marketing digital”).
• Metodologías y principios (“Los fundamentos del storytelling en marketing”).
• Errores comunes (“7 errores en SEO que debes evitar”).
Estos formatos funcionan porque no dependen de la actualidad y pueden actualizarse fácilmente si algo cambia.
5. Valida el tema con el contenido que ya funciona
Antes de lanzarte a escribir, haz una búsqueda en Google y revisa los primeros resultados.
• Si ves que los artículos en el top llevan años posicionados, es buena señal: significa que el tema sigue siendo relevante.
• Si encuentras artículos antiguos que podrían mejorarse, tienes una oportunidad de oro para crear algo más completo y actualizado.
El contenido evergreen bien elegido es una inversión a largo plazo. Si eliges un tema que se mantenga relevante, seguirás recibiendo tráfico y leads sin esfuerzo extra durante años.
La estrategia del “content pruning”: mantener lo evergreen siempre fresco
El contenido evergreen no es un “publica y olvídate”. Para que siga generando tráfico y posicionamiento, necesita mantenimiento. Aquí entra en juego el content pruning, una técnica clave para mantenerlo actualizado y en forma.
Piensa en el content pruning como la poda de un árbol: si cortas las ramas secas y lo cuidas, crecerá con más fuerza. En cambio, si lo dejas abandonado, se llenará de hojas marchitas y perderá vigor.
¿Por qué es importante hacer content pruning?
El tiempo no perdona, ni siquiera a los contenidos evergreen. Hay varios factores que pueden hacer que un artículo deje de ser relevante:
• Información desactualizada: datos, estadísticas o ejemplos que ya no son válidos.
• Cambios en el sector: herramientas o tendencias que han evolucionado.
• Competencia más actualizada: si otros han mejorado su contenido y tú no, perderás posiciones. Y no creas que la competencia no está mirando, ya te digo yo que sí.
• Enlaces rotos o imágenes antiguas: Esto afecta a la experiencia del usuario y al SEO.
Actualizar regularmente los contenidos evergreen ayuda a mantener su relevancia y evitar que pierdan posiciones en Google.
¿Cómo aplicar el content pruning paso a paso?
1. Haz una auditoría de tu contenido
Revisa los artículos evergreen que llevan tiempo publicados. Herramientas como Google Search Console o Google Analytics te ayudarán a detectar cuáles han perdido tráfico o posicionamiento.
2. Actualiza la información clave
• Revisa datos, estadísticas y ejemplos.
• Sustituye herramientas o tecnologías antiguas por opciones actuales.
• Comprueba que los enlaces siguen funcionando.
3. Mejora el SEO sin perder lo que ya funciona
• Revisa las palabras clave y ajusta si es necesario.
• Añade preguntas frecuentes (FAQ) que respondan nuevas dudas del usuario.
• Mejora la estructura con subtítulos y párrafos más claros.
4. Refuerza el enlazado interno
• Enlaza el artículo con otros contenidos nuevos de tu web.
• Asegúrate de que otros artículos antiguos también enlazan a este, para reforzar su autoridad.
5. Optimiza para la experiencia de usuario
• Revisa la velocidad de carga y el diseño del artículo.
• Añade nuevos formatos (infografías, vídeos, audios) si es posible.
Ejemplo de content pruning en acción
Imagina que tienes un artículo titulado “Cómo mejorar tu posicionamiento en Google” publicado en 2019. Durante años ha sido uno de tus posts más leídos, pero notas que ha empezado a perder visitas.
Sigues estos pasos:
✅ Actualizas las estrategias de SEO con información más reciente.
✅ Eliminas referencias a herramientas que ya no existen y añades nuevas.
✅ Mejoras la estructura del texto para que sea más fácil de leer.
✅ Insertas enlaces a artículos nuevos que has publicado desde entonces.
✅ Cambias algunas imágenes por versiones más modernas y optimizadas.
Tras aplicar estos cambios, Google lo considera un ¡contenido actualizado y lo vuelve a posicionar mejor! Así es como un buen artículo evergreen sigue vivo y generando tráfico con los años.
El content pruning es una tarea que muchas empresas olvidan, pero marca la diferencia entre un contenido que perdura y otro que se queda en el olvido.
Factores clave para que el contenido evergreen realmente funcione
Vale, ya tienes un tema evergreen potente, lo has escrito con cariño y lo has publicado. Pero… ¿cómo te aseguras de que realmente funcione y siga atrayendo tráfico durante años?
Hay varios factores clave que hacen que un contenido evergreen no solo dure, sino que siga dando resultados sin volverse irrelevante. Vamos a verlos, pero sin obsesionarnos con hacerlo todo perfecto (que aquí no estamos para fabricar enciclopedias).
SEO: hacerlo bien, pero sin volverse loco
El SEO es importante, claro, pero tampoco hay que escribir pensando solo en Google. La clave está en usar palabras clave que la gente busque hoy y dentro de cinco años. Nada de “Las mejores estrategias de redes sociales en 2024”. Mejor algo como “Cómo crear una estrategia de redes sociales efectiva”.
Ah, y otro truco: usa preguntas en los subtítulos. Google cada vez da más importancia a los contenidos que responden directamente a lo que la gente busca. Si puedes estructurar tu contenido en forma de respuestas, mejor que mejor.
Que sea fácil de leer, por favor
Si un artículo parece un testamento, nadie va a leerlo. Y lo evergreen no funciona si la gente se aburre antes del segundo párrafo.
Hazlo sencillo: párrafos cortos, frases directas y algún respiro visual (listas, imágenes, negritas bien usadas…). No hace falta escribir como si fueras un robot de Wikipedia.
Además, piensa en el móvil. La mayoría de la gente leerá tu contenido desde el móvil, y un bloque de texto enorme es lo último que quieren ver.
No lo publiques y lo dejes morir
Si creas un contenido que vale la pena, no lo compartas solo el día que lo publicas. Reutilízalo.
• ¿Es una guía extensa? Saca pequeños fragmentos para redes sociales.
• ¿Tiene datos interesantes? Conviértelos en una infografía.
• ¿Es un tema complejo? Graba un pequeño vídeo explicándolo.
Y de vez en cuando, vuelve a compartirlo. No pasa nada por reciclar contenido si sigue siendo útil.
Revisión de vez en cuando (sin obsesionarse)
El contenido evergreen es como una planta: si la riegas demasiado, la ahogas, pero si la dejas olvidada, se seca.
Revisa tus artículos cada cierto tiempo. Si notas que han perdido tráfico o que han quedado un poco viejos, actualízalos. A veces basta con cambiar un par de datos o añadir un nuevo párrafo para que vuelvan a subir.
Y no olvides mirar cómo se comportan en Google. Si ves que un artículo que antes funcionaba ha caído en los rankings, algo habrá que ajustar.
Lo importante: que sea útil hoy y mañana
Si algo define al contenido evergreen es que sigue teniendo sentido con el tiempo. Si consigues que alguien lo lea dentro de dos años y siga encontrándolo útil, habrás hecho un buen trabajo.
Así que olvídate de tendencias pasajeras, escribe para las personas (no solo para Google) y mantén tus mejores artículos vivos con pequeñas actualizaciones. Si haces esto bien, tendrás contenido que seguirá trabajando para ti durante mucho tiempo.
Checklist final para contenido evergreen que realmente dure
Si has llegado hasta aquí, ya tienes claro qué es el contenido evergreen, por qué es importante y cómo hacerlo bien. Ahora, para que no se quede en teoría, aquí tienes una checklist rápida que puedes usar antes de publicar cualquier contenido y en las revisiones periódicas.
✅ Antes de publicar: ¿realmente es evergreen?
☐ ¿El tema sigue siendo relevante dentro de un año o más?
☐ ¿No depende de tendencias o noticias temporales?
☐ ¿Responde a una pregunta que la gente se hace de forma recurrente?
☐ ¿Está optimizado para SEO con palabras clave atemporales?
☐ ¿Es fácil de leer y escanear (párrafos cortos, subtítulos, listas…)?
🔄 Mantenimiento: ¿sigue funcionando bien?
☐ ¿El tráfico se mantiene estable o ha caído? (Revisar en Google Analytics)
☐ ¿El contenido sigue siendo 100 % preciso o hay información desactualizada?
☐ ¿Las herramientas, ejemplos y enlaces siguen funcionando?
☐ ¿Se puede mejorar con nuevas imágenes, vídeos o formatos?
☐ ¿Está enlazado desde otros artículos recientes para reforzar su visibilidad?
🚀 Estrategia de difusión: ¿lo estás aprovechando bien?
☐ ¿Se ha compartido en redes sociales más de una vez?
☐ ¿Se ha enviado en una newsletter o reaprovechado en otros formatos?
☐ ¿Hay oportunidades para convertirlo en un vídeo, infografía o episodio de podcast?
☐ ¿Se puede mejorar el SEO con preguntas frecuentes o nuevos términos de búsqueda?
Si un contenido cumple con estos puntos, es que está bien hecho y tiene muchas posibilidades de seguir funcionando durante años. Y si no, ya sabes qué ajustar.
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