Muchas marcas consideran  invertir en  anuncios publicitarios para incrementar la cantidad de clientes en su negocio. De hecho, creen que esto es más importante que crear contenido de buena calidad.

¡¿Por qué creen esto?!  

Aunque no lo creas, hay marcas que consideran que estas dos acciones son de ramos distintos y nunca se deben involucrar. Volvemos a repetirles que esto es un grave error.

Invertir –que no es lo mismo que pagar – en campañas de ads en Google o Facebok, por ejemplo, funciona para aumentar el conocimiento de marca de una manera más rápida. Conseguir nuevos clientes a través de esta práctica es una tarea más  fácil, pero convertirlos en clientes leales y que compren más de una vez es otra historia. Recuerda que no eres el único que estás anunciándote, hay muchos más competidores que buscan lo mismo que tú y si no tienes nada que ofrecer, te perderás en el mar de la irrelevancia. Por eso, debes buscar la forma de sobresalir, con la finalidad de que el público voltee a verte y sepa que eres la única opción.

Hacer contenido no es nada fácil, y muchas personas te dirán que está es  la razón principal por la cual ni consideran dar el siguiente paso, que es crear un blog y escribir continuamente.  Sin embargo, te voy a compartir el gran impacto que puedes obtener

 al escribir contenido, y considerarlo como  la mejor inversión para tu marca.    

Generas confianza.

¿Cómo puedes obtener la confianza de un usuario que apenas tiene el primer contacto con tu marca? Con el siguiente proceso:

• Conocer sus intereses,
• Satisfacer esos intereses y
• Hablarles de ti

Cuando se presenta un problema, es común recurrir siempre a quien te pueda ayudar a solucionarlos, y si el resultado fue favorable, va a haber más de un contacto.   

En otras palabras, una vez que el usuario ha llegado a ti, debes brindarle la mejor ayuda posible, trata de satisfacer las inquietudes que presente y guíalo por el camino de la fidelidad hacia tu marca.

Convierte a los usuarios en clientes fieles

No es simplemente crear contenido y compartirlo; hay muchos detalles que debes tener en cuenta para fomentar el interés y ganar completa fidelidad de su parte. La calidad del contenido debe ser buena, mejor que la de tu competencia, porque si no encuentra lo que realmente necesita, la probabilidad de regresar a tu sitio es escasa.

También no olvides que debes publicar constantemente, porque de nada sirve que tu contenido sea relevante si sale una vez al mes. La información, noticias o novedades son el pan de cada día y es de suma importancia hablar de las actualizaciones que se presentan.   

Una vez que tengas información suficiente, que sea completamente relevante, induce a seguir leyendo y explorando todo lo que tengas que ofrecer en tu sitio web.

Ofertar tu contenido de manera gratuita es muy importante, emplear imágenes, videos, ebooks  y cualquier otro recurso que te ayuden a completar y respaldar tu información. Resolver sus inquietudes y tener una buena presentación, aporta más de una razón para invertir todo su tiempo en tu marca.

Aumenta la retroalimentación

La retroalimentación tiene un gran peso al redactar nuevos contenidos. Ya que lograste captar la atención del cliente y comenzaste a crear cierta lealtad a tu marca, es momento de que se conozcan mejor.

Interactuar te permitirá medir tu desempeño mediante preguntas como ¿lo estoy haciendo bien?, ¿necesito hacer cambios? Te permite analiza tus propuestas, averiguar qué es lo que te conviene y qué es lo que está pidiendo tu audiencia. Un buen contenido debe brinda soluciones y solo vas a saber cómo lograrlo si haces caso a las peticiones.  

Obtienes prestigio con el contenido

Todas las marcas anhelan ser la número uno ante su mercado, los que ofrezcan los mejores productos o servicios. Sí, es una buena meta, pero mejor plantea la posibilidad de ser considerado el mejor no solo por lo que obtienes, sino también por la manera en la que colaboras con otras marcas.  

Mucho se obtiene de la colaboración con otros colegas, ellos tienen una audiencia que puede ir hacia tu marca, y te pueden ayudar a adquirir más  experiencia en temas que ellos dominan. Puedes conocer distintos puntos de vista y con este pensamiento y actitud, ser considerada líder por la disposición que tienes para colaborar. Tu marca obtiene prestigio gracias al respaldo de mentes que reconocen tu capacidad.

Mejora tu SEO

La fórmula infalible para que tu contenido sea oro debe de ir acompañada de ciertas cualidades:

La redacción debe ser impecable, no te olvides de mantener siempre tu estilo y una estructura clara.

Céntrate específicamente en un grupo y aunque creas que tu contenido aplica para todas las personas, mejor concéntrate en un sector. Si no sabes exactamente hacia quién va dirigido, probablemente no tenga el éxito que quieras, ni con los visitantes y mucho menos en los buscadores.  

Elige bien las palabras clave que quieres utilizar, y optimiza el texto de manera natural. Es muy fácil caer en el error de poner un sinfín de palabras clave sin enfocarte en las que realmente son necesarias y útiles.

Elige un buen título, que  represente realmente a tu contenido, porque este elemento determina en gran parte si tu post es considerado como lectura.

Edita tus URL, incluye tu palabra clave, utiliza guiones (-) y elimina los caracteres extraños.

En resumen, no hay nada mejor que poder ofrecer un buen contenido de calidad, con las palabras claves adecuadas y que esté posicionado en los mejores resultados de búsqueda.

Las empresas que no le apuestan a los contenidos tendrás menos posibilidades de que triunfen en este medio. Los clientes actuales tienen altas expectativas y quieren ser parte de experiencias memorables, así que si no tienes una propuesta de valor que adjuntar, tienes un fuerte problema.

Ahora que tienes más de una razón para empezar a invertir en contenido, es momento de poner manos a la obra. No te preocupes si no sabes por dónde empezar, si ya tienes una idea investiga sobre ella – seguramente existen muchos blogs que están hablando de lo mismo – obtén información, indaga en sus sitios y crea tu propuesta.

No olvides hacer uso de todas las herramientas que estén al alcance para darle el impulso que necesita tu marca.

¡A trabajar se ha dicho!