Si eres asiduo a este blog sabrás lo mucho que me interesa el tema de storytelling y su aplicación en marketing. Es fascinante cómo podemos adaptar este concepto a los productos que vendemos y conocer mejor los mecanismos de compra. Hoy quiero centrarme en un concepto conocido pero poco valorado, que las redes sociales han puesto en el punto de mira de muchas personas como forma alternativa de ingresos, el embajador de marca.
Qué es un embajador de marca
Un embajador de marca es un cliente satisfecho que promociona los productos y servicios de forma espontánea o acordada con la empresa. Comparten su experiencia positiva y son de gran valor para la marca porque amplifican su alcance sin que esta realice importantes esfuerzos humanos y/o económicos.
Por qué son tan valiosos los embajadores de marca
Porque cuentan su experiencia positiva y, en la mayoría de los casos, no media una contraprestación económica. Están impulsados por verdaderas conexiones humanas, lo que en la era de las redes sociales es mucho.
En qué se diferencia un embajador de marca y un influencer
Nada más fácil. Un influencer suele ser una persona con una considerable comunidad en redes sociales (si quieres saber la diferencia entre influencer y micro influencer, consulta la entrada relacionada). Un embajador de marca, por el contrario, es una persona que, tras una experiencia positiva, la comparte con otras personas con el ánimo de ayudar a los demás.
Las redes sociales han aumentado enormemente la importancia de los embajadores de marca para las empresas. Los estudios demuestran que los usuarios que se están planteando una compra, consultan las redes sociales para tomar decisiones de compra.
Si ofreces los incentivos adecuados a estos embajadores, pueden suponer para tu marca un impulso importante para tu difusión y la consecución de tus objetivos de marketing, ampliando la voz de tu marca.
Lo fundamental es reconocer el tipo de embajador de marca que funciona para ti y aprovechar todo su potencial. Empecemos por distinguir los distintos tipos de embajadores de marca que puedes encontrar entre tus clientes o consumidores.
Los ocho tipos de embajadores de marca
Hay muchas clasificaciones de tipologías de embajadores, voy a utilizar una de las más comunes. Si crees que falta alguna, no olvides comentar este post para que pueda añadirla abajo ??????
- El tuiteador
- El turista
- El abogado
- El analista
- El VIP
- El detective
- El anónimo
- El abanderado
El tuiteador ?
Podríamos llamarlo también el Fan incondicional. Es ese tipo de cliente que está deseoso de compartir la experiencia. Es muy activo en redes sociales y en su timeline puedes encontrar comentarios de todas sus experiencias, buenas y malas, por lo que debes tener cuidado.
Si les gustan tus productos o servicios serán muy activos, pero también son muy sensibles a tu marketing y tu posicionamiento de marca en otros terrenos, por lo que conviene ser prudentes con ellos.
El turista ?
Al contrario que el embajador de marca anterior, el turista no se propone compartir nada relacionado con tu marca a no ser que le parezca interesante.
Son susceptibles a tu contenido siembre y cuando les interese, por lo que no hay mucho que puedas hacer por atraer su atención más allá de lo que estás haciendo en estos momentos.
El abogado ??⚖️
Lo llamamos así porque defenderá tu marca contra viento y marea. Están enamorados de tu marca y son tus clientes más fieles. Predican su amor a diestro y siniestro, incluso si no reciben ningún incentivo.
Si quieres que sean aún más activos, búscalos con una herramienta de monitorización de marca como Brand Monitoring de Semrush y recompensa sus esfuerzos con un reconocimiento público.
El analista ?
Es exhaustivo y concienzudo. Antes de compartir su amor por tu marca, se asegurará de haber hecho los deberes.
Su reputación se basa en el conocimiento y en poder respaldar su información con datos. Puedes contactar con ellos si sabes quiénes son, claro.
Normalmente, suelen compartir reseñas de productos en blogs o escribir sobre contenido técnico. Si detectas que tienen una gran comunidad, puedes ofrecerles probar tu producto. Eso sí, siempre con todos los datos técnicos que apuntalen bien su toma de decisiones o no te recomendarán.
El VIP ?️
También puedes llamarlos influencers o celebridades. Poseen grandes audiencias en redes sociales, aunque no necesariamente tienen que ser rostros conocidos por todos, pueden ser personas influyentes en tu sector por su especialización o su labor divulgativa.
No es nada fácil conseguir una mención espontánea de ellos porque saben que las marcas están habituadas a pagar por sus menciones en redes sociales. Por lo tanto, trabaja con ellos cuando tengas claro el retorno de la inversión que pueden proporcionarte.
Hace poco descubrí que en ahrefs puedes consultar la cantidad de dinero que puede darte una url bien situada en Google, como puedes ver en esta imagen:
Puede ser una primera aproximación a las cantidades que acepta un VIP que además tenga web o blog, antes de contactar con él y pedirle su caché.
El detective ?
También podríamos llamarles los Embajadores éticos. Se preocupan enormemente por su comunidad, por lo que investigarán su marca hasta la saciedad antes de comprometerse con ella. Mirarán en tus perfiles sociales con celo para detectar fallos o cosas que les impiden asociarse a tu marca.
Sienten la necesidad de compartir con las redes sociales en general y con su comunidad en particular aquello que no les gusta de la industria. ¡Ojo con ellos!
El anónimo ?
No buscan ninguna validación por parte de la marca, al contrario de lo que veremos en el abanderado. Elige publicar de forma anónima, buscando dar una opinión sincera a los que les interese prestarle atención. Están muy al día y su falta de interés en el reconocimiento ayuda a que tengan credibilidad.
No hay mucho que puedas hacer por alentarles, más allá de premiar su participación con publicaciones en redes sociales e intentar interactuar con ellos.
El abanderado ??
También podemos llamarle el “adelantado” porque se jactan de haber sido los primeros en encontrar tu marca o en probar tu último producto. Para ellos es importante que se sepa que son los más espabilados y llamarán tu atención como marca.
Tu misión es encontrarles y darles el reconocimiento que buscan para convertir en fuertes embajadores de tu marca.
Cómo encontrar embajadores de marca
Todo esto está fenomenal, pero seguro que te estás preguntando cómo puedes conseguir que todos estos embajadores, los más activos sobre todo, trabajen para tu marca.
Lo primero que debes hacer es encontrarlos, porque de lo contrario, toda esperanza es vana.
Hay muchas herramientas ahí fuera para encontrar este tipo de embajadores de marca, pero quiero compartir contigo las que he probado personalmente.
Herramientas para encontrar embajadores de marca
Lo primero que tengo que decir es que no hay herramientas exclusivamente dedicadas a este tema, normalmente es una función que se integra dentro de la monitorización de redes sociales, por lo que deberás considerar el resto de las funciones por si te compensa cambiarte de herramienta de gestión de redes.
Brand monitoring
La primera de las herramientas, que he utilizado en varias campañas de relaciones públicas digitales en los últimos años, pertenece a la suite de Semrush.
Gracias a ella puedes seguir menciones de tu marca en webs, blogs, noticias y publicaciones online allí donde se generen.
Por definición, no puedes alcanzar a todos los embajadores de tu marca. Es imposible. Busca solo aquellos que más rédito te ofrecen y establece relaciones profundas con ellos.
Permíteles acceso temprano a productos y servicios, ofréceles contenido que les interese según su perfil y define una estrategia para encontrarles.
Ejemplos de programas de embajadores de marca
Una forma excelente de incentivar a los embajadores de marca es que crees un programa de embajadores, para que sean ellos los que salgan a tu encuentro.
¿Te animas? Estos son algunos de los pasos que debes seguir.
Define una metas claras
No confundas un programa de embajadores con una treta para conseguir más ventas. Un programa de este tipo puede buscar más visibilidad en redes sociales, aumentar el alcance de las publicaciones o conseguir contenido generado por los clientes con el que alimentar las redes sociales pero, definitivamente, NO más ventas.
En este ejemplo de Printful se indican las ventajas de su programa de embajadores de marca. Desde mi humilde punto de vista, la marca se lleva mucho más de lo que recibe el usuario. ?
Promociónalo
De nada servirá que crees un programa de embajadores si nadie forma parte de él, ¡necesitas darlo a conocer! Comienza por preparar algunas cosas, como una pequeña estrategia de marketing para defensores de marca que incluya:
- Una landing page.
- Un formulario sencillo para conseguir candidatos.
- Una mecánica clara y bien explicada.
- Material promocional para las redes sociales.
- Un kit de prensa para darlo a conocer a los medios.
- Algún caso documentado de un embajador de marca que puedas mostrar a periodistas y blogueros.
Formaliza la relación
Una relación con un embajador debe formalizarse para definir roles y responsabilidades. Se trata de que haya una sana relación entre lo que hace la marca y lo que recibe el usuario.
Ponte en contacto con los potenciales embajadores y proponles una forma de colaboración en la que ambas partes estéis cómodos.
Responde a preguntas que te harán los embajadores, como por ejemplo:
- ¿Cuáles son los beneficios de unirse a tu programa? Piensa en el tipo de compensación que vas a ofrecer: efectivo, productos gratuitos, acceso a productos premium o en fase beta, etc
- ¿Cuales son las obligaciones a cumplir? Tus embajadores querrán saber los detalles legales, las expectativas y qué deben hacer en caso de que no quieran continuar.
Sigue el rendimiento
No dejes de medir. Los programas de embajadores deben ser rentables, o te cargarás con un trabajo que no tiene sentido.
Define indicadores de medición precisos y fáciles de seguir, como por ejemplo:
- El número de candidatos vs. los embajadores del programa.
- El importe de los productos entregados o el valor económico equivalente en la compensación que les vayas a ofrecer.
- El alcance de las publicaciones en redes sociales de los embajadores, si ese es el objetivo del programa.
- El número de horas que el equipo de marketing dedica a planificar, gestionar, optimizar y medir el programa.
- El precio de las herramientas de monitorización y gestión.
Para terminar, recordarte que un embajador de marca es la forma digital del boca a boca. Se trata de una estrategia que puedes poner en marcha sin romperte los cuernos y que puede ofrecerte una gran cantidad de beneficios para tu empresa.
0 comentarios