Dicen que si no puedes enganchar a una persona con los primeros 20 segundos de tu exposición, la has perdido. Por eso es tan importante apostarlo todo por aprender cómo escribir una introducción. Da igual si es un artículo, una tesis, un trabajo universitario o un ensayo científico. O enganchas al lector, o lo pierdes.
Cómo escribir una introducción que enganche
Una introducción típica es el primer párrafo de tu artículo, aquel que empezará a rellenar la hoja en blanco. Su objetivo es permitir al lector saber qué debe esperar de tu texto.
No hay una fórmula mágica para redactar una buena introducción. La buena noticia es que sí hay algunas cosas que puedes hacer para mejorar las que has escrito hasta el momento.
Atrae la atención del lector
Se llama “gancho” y se utiliza en todas partes: en los cuentos infantiles, en los anuncios, en las películas, en las novelas.
La idea es captar la atención del lector para introducirlo en tu universo y ofrecerles tu punto de vista. Lo puedes ver muy rápidamente en los primeros minutos de una buena película. Para cuando te quieres dar cuenta, ya estás dentro.
Aquí tienes algunas sugerencias de cómo crear un “gancho” para una introducción:
- Plantea hechos interesantes o hechos sobre tu tema
- Haz un pregunta retórica (mi recurso más utilizado)
- Revela un concepto erróneo sobre tu tema
- Establece los elementos clave de tu historia: quién, cuándo, dónde, qué, por qué, cómo.
- Comparte una anécdota que pueda reflejar la esencia de tu tema
Mantén la exposición de tu tema
Después del “gancho”, escribe una par de frases que ayuden a tu lector a estar centrado en tu historia. ¿De qué trata tu artículo? ¿Cuál es el tema más importante? Esta parte de la introducción puede incluir información de contexto sobre tu tema.
Ojo, porque esta información no debe ser muy técnica, aunque el tema sí lo sea. Nunca sabes qué tipo de usuario va a leer tu artículo/ebook/documento técnico. Si comienzas con un tono muy técnico, puede que los usuarios menos avanzados se asusten y se vayan.
Mi recomendación para con tu tema es: exponerlo con sencillez en la introducción y desarrollarlo a continuación, entrando en detalles.
Establece tu tesis
Por último, incluye tu tesis. El tipo de tesis dependerá mucho del tipo de documento que estés redactando, pero en general, debería incluir:
- tema específico
- punto más destacado sobre el tema
- los puntos de discusión que debe incluir el artículo
Dicha tesis debe ser clara y fácil de encontrar. Con más frecuencia, debería ser la última sentencia de la introducción.
Cómo escribir una introducción en tres pasos
Además de estas recomendaciones, hay otro paso para aprender cómo escribir una introducción que puedes seguir ahora mismo.
La clave del éxito es conocer los elementos que debes incluir y mezclarlos con sabiduría. Así como los ingredientes de una receta deben ser incluidos en su medida justa, una introducción debe tener un poco de todo en su justa medida.
Paso 1: establece la idea principal
El primer ingrediente que debes incluir es un tema principal. El lector debe percibirlo rápidamente para que pueda apreciar si el artículo, ensayo o documento técnico es exactamente lo que está buscando.
Seria ideal que lo hagas coincidir con la primera frase de tu introducción. De este modo, servirá de gancho para que el lector siga leyendo.
Entre los recursos más utilizados se encuentra el comienzo con citas, preguntas o un hecho interesante que poca gente conozca.
Este sería un buen comienzo para un ensayo sobre el café:
“La mitad de los estadounidenses son drogadictos, ya que la cafeína se ha convertido en la droga más utilizada en el mundo“.
¿Impactante, no? El lector reaccionará con indignación o con curiosidad, pero en cualquier de los dos casos, habrás despertado una sensación que le hará seguir leyendo.
Paso 2: ofrece más detalles
Ya tienes la frase principal que, además, sirve de gancho para el lector. El siguiente ingrediente de nuestra receta a seguir será ofrecer más detalles.
No debes extenderte mucho o perderás al lector enseguida.
Por ejemplo, en el ejemplo anterior, puedes decir
“La mitad de los estadounidenses son drogadictos, ya que la cafeína se ha convertido en la droga más utilizada en el mundo. Con tiendas como Starbucks en cada esquina, el café se ha convertido en el centro de la vida de muchas personas. Debido a su creciente popularidad, muchas personas dependen del café para llegar al final del día“.
Ya has despertado el interés del lector, es hora de explicarle el background de la afirmación con la que les has golpeado.
Paso 3: añade una buena conclusión
No estoy hablando del final de tu artículo, sino del final de la introducción. Sí, has leído bien, las introducciones también tienen sus propias conclusiones.
La frase final debe contener un nexo entre lo que has contado y el próximo párrafo. O entre la introducción y el primer capítulo si se trata de un ebook, por ejemplo.
Debe ser contundente, pero sobre todo debe ayudarte a que el lector avance más.
Si seguimos con el ejemplo anterior, esta sería una buena conclusión para el párrafo de introducción:
“A medida que más y más personas dependen del café, la cafeína se ha posicionado como una droga adictiva“.
No te olvides de un detalle: incluye aquellas palabras que te ayuden a dibujar una imagen mental que haga parte del trabajo.
Y sobre todo, evitar las exageraciones, ya hay demasiados textos sobrecargados de “este artículo te va a cambiar la vida sobre lo que piensas del café“.
No olvides a lo largo de tu escritura agregar palabras de moda que puedan transmitir tu argumento de una manera mejor.
Por ejemplo, “Quiero contarte algo sobre la industria del café” puede convertirse en “Déjame contarte una historia sobre la industria del café que no te gustará“.
Estamos en la era de las historias, ya nadie reacciona con “Puf, esto va a ser un plomo“, sino con un “Cuéntame más“.
Pero ten cuidado con no exagerar, ya que abusar de las palabras o trucos de moda puede hacer que tu público no entienda nada. Por ejemplo, si les dices que va a contarles una historia y no hay historia, se van a enfadar.
Conclusiones
Una conclusión funciona cuando recuerda al lector los puntos más importantes del ensayo y resume lo que queremos que se lleve. Considera estos consejos cuando escribas la conclusión:
- Comienza con una reformulación de la tesis.
- Resume los puntos más importantes de dicho trabajo y muestra cómo respaldan el argumento.
- Termina con la explicación del significado del argumento y por qué es importante lo que se ha añadido al tema. ¿Desea hacer cambiar al lector de opinión, que se cuestione algo o que realice alguna acción?
Cómo escribir una introducción es una de esas cosas que algunos tienen de forma natural cuando se trata de redactar pero que, definitivamente, se debe aprender a hacer. Te espero en los comentarios para saber cómo lo haces y qué consejos tienes para mi audiencia.
Genial
¡Gracias!